Señor Padre Nuestro
Padre Nuestro
Padre nuestro que estás en los Cielos
Padre de todos nosotros: los jóvenes, los niños, los mayores. De los que no Están con nosotros, de los que partieron. De los amigos y de los que no son
Santificado sea Tu Nombre
En la oración solitaria o alrededor de nuestra mesa, en la calle, en el trabajo En los campos y en el mar. En la Creación entera Te adoramos, te bendecimos, te glorificamos
Venga a nosotros tu Reino
Construyendo un país de hermanos en el quehacer de cada día En la esperanza de reconocerte Padre En el ahora y en el siempre
Hágase Tu voluntad
Y no la nuestra. Que realmente nos amemos, sabiendo aceptar, comprender y perdonar A todos los hermanos, forjando la unidad en la verdadera paz
Así en la Tierra como en el Cielo
Porque nacimos de Ti y es tu Amor quien vive en nosotros Y vivirá por la eternidad si en la Tierra lo compartimos con los demás
Danos hoy nuestro Pan de cada día
Danos hambre de Ti a los que tenemos pan Danos pan y justicia a los que tenemos hambre
Perdona nuestras ofensas
Perdona el mal que hemos hecho y El bien que dejamos de hacer
Así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden
Padre ten misericordia de nosotros, porque nos aflige tu mandato Ayúdanos a perdonar de corazón para lograr así tu perdón
No nos dejes caer en la tentación
De creernos superiores, de perder toda esperanza, De extraviar el camino, de ignorar la verdad y así perder tu vida
Líbranos de todo mal
De la indiferencia, de la división, del enemigo maligno, defiéndenos Que nunca separemos lo mío de lo tuyo, a ellos de nosotros, Ayúdanos a no desmayar en proclamar la Fe , en dar razón de la Esperanza En ser testigos de tu amor
Así Sea--Amé!!!