La Guardia Pretoriana De Benedicto XVI
Padre Tomás Del Valle-Reyes
24 de Marzo, 2006
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Este viernes, 24 de marzo, el Papa Benedicto XVI está celebrando su primer Consistorio Ordinario Publico en el que creará 15 nuevos cardenales, tres de los cuales han superado la edad de 80 años. Este día, el colegio cardenalicio quedará formado por 193 miembros, de los cuales 120 son electores, es decir tienen menos de 80 años y gozarían del exclusivo derecho de participar en el cónclave para elegir a un nuevo Papa.
Europa contará con 100 cardenales, de los cuales 60 son electores. El continente americano tendrá 52 cardenales (América del Norte 20 y América Latina 32) de los que 36 son electores. Los cardenales de África serán 17 (9 electores), los de Asia 20 (13 electores) y Oceanía contará con 4 (2 electores). En una elección papal en estos momentos el voto americano sería el 30 por ciento, con un peso suficiente para decidir una elección o bloquearla.
El país con mayor número de cardenales sigue siendo Italia con 40, incluyendo los 3 creados el 24 de marzo. Le siguen Estados Unidos con 15 y España y Francia respectivamente con 9.
En este Consistorio se seguirán las normas elaboradas para el Consistorio del 28 de junio de 1991. Tras el saludo, el Papa lee la fórmula de creación y proclama solemnemente los nombres de los nuevos cardenales. El primero de los nuevos elegidos dirige al Papa unas palabras en nombre de los demás. Tras la lectura de una serie de textos escogidos de la Biblia, el Papa pronuncia el discurso del día. A continuación, sigue la profesión de fe y el juramento por parte de los nuevos cardenales de fidelidad a la Iglesia y al Papa, la imposición de la birreta, o sombrero rojo, y la asignación del Título o de la Diaconía de Roma, como signo de participación en la solicitud pastoral del Papa por la ciudad. El Papa entrega la Bula de Creación de Cardenales e intercambia el abrazo de paz con cada uno de los nuevos miembros del colegio cardenalicio quienes, a su vez, cumplen el mismo gesto entre ellos. El acto concluye con la oración de los fieles, el rezo del Padrenuestro y la bendición final.
Con este simple pero elocuente acto Benedicto XVI elige a sus hombres de confianza que le han de ayudar a gobernar la Iglesia. De hecho el jueves ya mantuvo una primera reunión con todos los cardenales de la Iglesia, tanto los mayores como los menores de ochenta años. Benedicto XVI, parco en palabras y en acciones, quiere alejarse lo más posible del modelo de Papa acuñado por Juan Pablo II. Quiere devolver al Colegio Cardenalicio el papel original que tuvo, la razón de ser del mismo: ser su cuerpo consultivo, su especie de Consejo de Administración. Los “cerebros grises” de la Iglesia. Dando una simple mirada a los nuevos cardenales se vislumbra cuales pueden ser los intereses de este papado. La preocupación por la creciente secularización de Europa, el diálogo y la apertura a China, la asignatura pendiente de Roma. La renovación del clero norteamericano va a contar con dos grandes figuras en el Colegio Cardenalicio: el Prefecto de la Congregación de la Fe y el Arzobispo de Boston. Ahora es que el Pontificado de Benedicto XVI empieza a caminar en firme Esta eligiendo sus hombres.